domingo, 19 de agosto de 2012

II Triatlón del Aravalle. Una repetición frustrada. (18-agosto-12)

La segunda edición de este gran triatlón, se presentaba con una mayor participación. Está claro que el éxito de la primera edición ha provocado un efecto llamada.

De nuevo la empresa Aretesport con Israel y Alberto a la cabeza han puesto en marcha un gran engranaje logístico, movilizado a gran cantidad de voluntarios para que podamos disfrutar de uno de nuestros deportes favoritos en plena naturaleza y en un entorno tan agradable como el Aravalle.
La prueba se celebraba, como el año pasado, a las 16:30pm, no obstante hay que llevar el material a la T1 y T2 antes de las 14:00pm.

Tras “madrugar” un poco, comienza el ritual de siempre; zapatillas, casco, portadorsal, mono, gafas,… todo ordenado para que no se olvide nada. Cargamos el coche y dirección al embalse de Santa Lucía para recoger el dorsal  y dejar el material de la T1. 
Aprovechando la coronación de la presa, vamos dejando nuestros enseres.
 
 
Como el año anterior, nos sorprenden con una gran bolsa del corredor; gorro (propio), dorsal, gorra, bebida isotónica, barritas, revistas,…

Reconocemos a simple vista el tramo en agua. Este año han cambiado el sentido de giro en la prueba, una única vuelta en el embalse que este año se aprecia mermado por la sequía. 
Pero cuál es nuestra sorpresa, que empezamos a ver una columna de humo en las inmediaciones del embalse y próximo a la población de Los Loros (por dónde pasaremos en 2 ocasiones con la bici) 
Al poco aparece el primer helicóptero de inspección que en breve saca la bolsa de agua para iniciar las labores de extinción. 
Decidimos acercarnos a La Zarza para dejar las cosas en la T2, comer y descansar previo a la prueba.
A eso de las 15:15pm salimos con el autobús dirección al embalse con la amarga sensación de que la prueba será complicado disputarla. Israel ya nos ha advertido de la situación. Efectivamente según nos aproximamos a la zona, se aprecia el avance del incendio que ha pasado a Nivel 2. Ahora hay 5 helicópteros y 1 hidroavión movilizados y nos piden que desalojemos el embalse para que los medios de extinción puedan trabajar convenientemente.

Cogemos nuestras bicis y por aprovechar un poco el día, la mayoría decidimos volver a La Zarza, dónde tenemos nuestros coches, en bici a través de un sendero que llega a Los Mazalinos y desde allí coger los últimos 4km de pista que hubiéramos tomado en la prueba. 
Un pequeño desquite para suavizar el amargor de no haber podido participar en esta prueba.

Una vez allí nos reunimos con los Organizadores para deliberar lo que se puede hacer y acordamos intentar encajar una nueva fecha para su desarrollo o la devolución de la inscripción.

Sin poder disfrutar de la caldereta que la Organización había preparado para finalizar la fiesta y que nos pedían aprovechásemos. Regreso a mi lugar de origen observando como el incendio (desconozco si es el mismo u otro conato) se va tragando la serranía desde El Losar hasta Palacio de Becedas. 
A las pocas horas tienen que cortar la carretera y desalojar Palacio de Becedas. Las labores de extinción continuarán durante toda la noche y parte de la mañana del domingo.


Conclusiones y reflexiones:
-    Al día siguiente nos enteramos de la amplitud del incendio y su intencionalidad. Desde este humilde blog, lamento mucho la actitud de estas personas que no comprenden la verdadera gravedad de sus actos.
-    Por otro lado, lamento que no se pudiera desarrollar la prueba, aunque afortunadamente para nosotros podría haberse convertido en una ratonera de haberse producido el incendio durante la misma.
-    De nuevo la Organización del evento, impecable. Aprendiendo de la primera edición y aplicándolo en esta nueva. Da gusto participar en pruebas como esta.

domingo, 5 de agosto de 2012

VI Triatlón Sprint de Plasencia (05-agosto-2012)

Tras el debut trialero del año pasado en esta misma prueba, había que repetir el evento para ver “cuanto había mejorado” desde entonces.
Tras el madrugón pertinente, a eso de las 7:00am, nos dirigimos hacia Plasencia para llegar a buena hora e ir preparando el material. De nuevo me acompaña mi incansable hermano para darme apoyo logístico y moral. Gracias brother!!!

Recojo el dorsal.
Y comenzamos con los preparativos de siempre; dorsales en casco, bici y portadorsal, colocar e hinchar ruedas, repasar la bici, coger las cosas del agua (neopreno y gafas), zapatillas y gorra para correr y listo. A boxes…
A eso de las 9:00am, ya dejan entrar en boxes para dejar el material. Este año han permutado los puestos y los primeros dorsales se sitúan justo a la entrada de la T1, a mí me toca al final del puente, lo cual se agradece, tendré que correr menos con la bici a cuestas.

Nos vamos dirigiendo los participantes hacia la cámara de llamada del agua. Está permitido el neopreno.
Vamos entrando al agua. Este año han ensanchado la rampa aunque no estaría mal que en lugar de la alfombra, habilitaran una rampa rígida en condiciones ya que la salida se hace bastante mala. 
Aguantamos la espera como podemos y sin darnos cuenta, piiiiiiiiiiiiiii!!! Salida. 
Este año no damos 2 vueltas a las boyas, han alargado el recorrido hasta el siguiente puente para dar una sola vuelta. Nuestra sorpresa es que a la vuelta (por la margen derecha) nos encontramos con una zona de unos 30m llena de piedras y con tan sólo 40cm de profundidad. Muchos de los participantes echan pie en roca e intentan avanzar “andando”.

Tras algo menos de 14min, salgo del agua como siempre, algo mareado . Encaro la rampa de cemento hasta boxes que este año no han tenido a bien protegerla con alfombra. 
Me voy quitando el neopreno mientras cruzo el puente. 
Agarro la bici y a rodar. Este año me he prometido no volver a errar y ser el único que tire de un grupo (como la novatada del año pasado). Me engancho con otro participante e intentamos tirar hacia adelante, aunque tras la primera vuelta nos alcanza un grupo numeroso al que nos unimos. 
Este año me siento bastante mejor en la bici, voy dando relevos pero sin agobiarme. 
En la última vuelta nos alcanza otro grupo bastante numeroso, vamos rodando a bastante velocidad y como en ocasiones ocurre cuando tanta gente rueda “nerviosa” a pocos km de acabar la prueba, un mal cruce y zas! al suelo. Afortunadamente ha sido en subida. Compruebo los daños de la bici (los míos en principio son menores) y tras comprobar que el rozón se lo llevó el manillar y los cambios más o menos van, sigo la prueba. Me resta sólo la bajada (unos 2,5km) para llegar a la T2. Entre el golpe y el estado de los cambios, pierdo bastante fuelle con el grupo en el que iba, una lástima! Aunque finalmente la media no ha sido tan mala (35km/h) con caída inclusive.

Finalmente llego a la T2, me enfundo las zapatillas (voy a probar sin calcetines , aunque al final comprobaré que debí ponérmelos) y a intentar volar.

Noto que las piernas, a pesar de los rozones, me responden y poco a poco me voy sintiendo cómodo en carrera.  
Estoy en ritmo de 4 - 4.10min/km y voy adelantando a algunos corredores del grupo del que me descolgué.

Una última vuelta y cuál es mi sorpresa que no puedo beber agua porque no hay vasos (“sí vasos”) preparados.
Ya veo el arco de meta, un pequeño sprint (y nunca mejor dicho) y ya estoy.
 
Al final no ha estado mal, puesto 91º y un tiempo de 1 hora 15 min 38seg.

Me curan las heridas de guerra y a reposarlas.

Conclusiones y reflexiones:
-    Tras un año participando en algún que otro triatlón, he de reflexionar acerca de la “Organización” de este evento. A pesar de la elevada cifra de la inscripción, los detalles durante y tras la prueba brillan por su ausencia, como si los recortes del Gobierno también hubieran llegado a este nivel. En ninguna de las numerosas pruebas en las que he participado por toda España (no sólo triatlones) me habían dado un vaso de agua durante los avituallamientos en prueba. Ni que decir cabe, que nada más coger el vaso (si vas a un ritmo moderado) la mitad del agua se vierte y te queda un triste trago. También se ahorraron en las gomas que daban para el control de vuelta, confiando en la buena fe de los participantes y el buen ojo del juez de turno. Aunque no he participado en otras pruebas extremeñas de esta misma Organización, parece ser que es la tónica habitual y por lo que oigo a compañeros que sí han participado, éstos no acaban muy contentos.
-    Al final de la carrera ni siquiera pudimos disfrutar de un obsequio recordatorio de la misma (cómo si ocurrió el año pasado cuando recibí una camiseta, aunque sin nomenclatura alguna de la prueba).
-    Tan sólo deseo que recapaciten y aprendan de otras pruebas cercanas en la misma Comunidad o incluso en la vecina Castilla y León, que por ese precio (incluso menos) ofrecen bastante más, ya que deseamos seguir teniendo ánimos de participar en pruebas como esta.
-    Enhorabuena a Javi por su victoria y a Laura por su 3º puesto y por supuesto un abrazo muy fuerte para los compañeros delfineros que participaron.